El domingo pasado tenía pensado ir al MATADERO, que todavía no conozco. Pero me invitaron a una visita guiada por la GRAN VÍA, y me tentó la idea. Enorme acierto: lo pasamos estupendamente –a pesar de las bicicletas, porque era el Día de la Bicicleta- y refrescamos cosas más o menos sabidas pero que suenan a nuevas cuando las explica un experto que disfruta contándolas.
Para empezar nos recordaron algunas ideas generales: que a finales del siglo XIX surge la necesidad de comunicar los dos grandes ensanches de Madrid (Argüelles y Salamanca) y las estaciones de Atocha y Príncipe Pío mediante una vía importante, que a la vez sirviera para descongestionar el centro de la ciudad (la Puerta del Sol); que al hacerlo hubo que demoler mucho caserío apelmazado y algún que otro edificio de interés; y que al estudiar el trazado se aprovecharon algunas calles existentes, pero también se abrieron partes nuevas, con las consiguientes dificultades generadas por las expropiaciones: algunos intentos previos que no llegaron a buen puerto, más coste del previsto y prolongación de los plazos. Nuestro guía acabó su introducción comentando que, además, había cierto afán de imitar a las grandes capitales europeas, que por entonces ya han construido importantes calles comerciales.
Comenzamos propiamente la visita recordando que el 4 de abril de 1910 el rey Alfonso XIII, con una piqueta de plata, golpeó la antigua Casa del Cura de la Iglesia de San José y dio por inauguradas las obras. La familia real asistía -desde un estrado, entendí yo- preparado en la CASA DEL ATAÚD, que ocupaba el solar del actual EDIFICIO METRÓPOLIS. El nombre le venía de lo estrecho que era el edificio ...
A medida que subíamos por la calle nos contaban cómo entre 1910 y 1915 se realiza el primer tramo de la GRAN VÍA, desde la Calle de Alcalá hasta la Red de San Luis (la llamada Avenida B en el proyecto, de 25 metros de ancho y con edificios de 25 metros de altura) que recibió el nombre de Calle del Conde de Peñalver, y que se llenó de edificios eclécticos, “neos” y regionalistas. Al pasar a la altura de la IGLESIA DEL CABALLERO DE GRACIA recordamos los problemas que surgieron con el ábside, que durante tanto tiempo todos hemos visto tapado con andamios y lonas. Por cierto, es un edificio estupendo de JUAN DE VILLANUEVA que vale la pena visitar.
Después recordamos que entre 1917 y 1922 se realiza la segunda fase de la GRAN VÍA, desde la Red de San Luis hasta Callao. En proyecto esta parte se llamaba El Bulevar, porque iba a tener uno en el centro de la avenida, e iba a ser más ancha y más alta que el tramo anterior: 35 metros en lugar de 25. Recibió el nombre de Avenida de Pí y Margall y se llenó de edificios mucho mas serenos y –en mi opinión- más interesantes, en la línea de la escuela de Chicago (lógicamente nada es químicamente puro, y siguen construyéndose edificios eclécticos y “neos”).
Llegamos a Callao, vimos los cines AVENIDA (ahora una megatienda de H&M) y CALLAO, el PALACIO DE LA MÚSICA y el PALACIO DE LA PRENSA, vimos el magnífico EDIFICIO CARRIÓN ... y paramos, porque se nos echó encima el medio día y algunos ya iban más que cansados de sabiduría y paseo: nos faltó la tercera parte, la Avenida A del proyecto original, entre Callao y la Plaza de España, que en tiempos fue la Calle de Eduardo Dato.
Para acabar visitamos –o mejor, echamos un vistazo- la IGLESIA DE LA BUENA DICHA, que yo no conocía porque desde hace tiempo estaba en obras: un sitio singular al que hay que volver.
He leído que durante 2010, con motivo del Centenario del inicio de las obras de la GRAN VÍA, el Ayuntamiento de Madrid piensa organizar una serie de eventos. Voy a ver si selecciónARTE es capaz de sumarse a la celebración, y a lo largo de los próximos meses comento algunos de los edificios emblemáticos de la calle.
Para empezar nos recordaron algunas ideas generales: que a finales del siglo XIX surge la necesidad de comunicar los dos grandes ensanches de Madrid (Argüelles y Salamanca) y las estaciones de Atocha y Príncipe Pío mediante una vía importante, que a la vez sirviera para descongestionar el centro de la ciudad (la Puerta del Sol); que al hacerlo hubo que demoler mucho caserío apelmazado y algún que otro edificio de interés; y que al estudiar el trazado se aprovecharon algunas calles existentes, pero también se abrieron partes nuevas, con las consiguientes dificultades generadas por las expropiaciones: algunos intentos previos que no llegaron a buen puerto, más coste del previsto y prolongación de los plazos. Nuestro guía acabó su introducción comentando que, además, había cierto afán de imitar a las grandes capitales europeas, que por entonces ya han construido importantes calles comerciales.
Comenzamos propiamente la visita recordando que el 4 de abril de 1910 el rey Alfonso XIII, con una piqueta de plata, golpeó la antigua Casa del Cura de la Iglesia de San José y dio por inauguradas las obras. La familia real asistía -desde un estrado, entendí yo- preparado en la CASA DEL ATAÚD, que ocupaba el solar del actual EDIFICIO METRÓPOLIS. El nombre le venía de lo estrecho que era el edificio ...
A medida que subíamos por la calle nos contaban cómo entre 1910 y 1915 se realiza el primer tramo de la GRAN VÍA, desde la Calle de Alcalá hasta la Red de San Luis (la llamada Avenida B en el proyecto, de 25 metros de ancho y con edificios de 25 metros de altura) que recibió el nombre de Calle del Conde de Peñalver, y que se llenó de edificios eclécticos, “neos” y regionalistas. Al pasar a la altura de la IGLESIA DEL CABALLERO DE GRACIA recordamos los problemas que surgieron con el ábside, que durante tanto tiempo todos hemos visto tapado con andamios y lonas. Por cierto, es un edificio estupendo de JUAN DE VILLANUEVA que vale la pena visitar.
Después recordamos que entre 1917 y 1922 se realiza la segunda fase de la GRAN VÍA, desde la Red de San Luis hasta Callao. En proyecto esta parte se llamaba El Bulevar, porque iba a tener uno en el centro de la avenida, e iba a ser más ancha y más alta que el tramo anterior: 35 metros en lugar de 25. Recibió el nombre de Avenida de Pí y Margall y se llenó de edificios mucho mas serenos y –en mi opinión- más interesantes, en la línea de la escuela de Chicago (lógicamente nada es químicamente puro, y siguen construyéndose edificios eclécticos y “neos”).
Llegamos a Callao, vimos los cines AVENIDA (ahora una megatienda de H&M) y CALLAO, el PALACIO DE LA MÚSICA y el PALACIO DE LA PRENSA, vimos el magnífico EDIFICIO CARRIÓN ... y paramos, porque se nos echó encima el medio día y algunos ya iban más que cansados de sabiduría y paseo: nos faltó la tercera parte, la Avenida A del proyecto original, entre Callao y la Plaza de España, que en tiempos fue la Calle de Eduardo Dato.
Para acabar visitamos –o mejor, echamos un vistazo- la IGLESIA DE LA BUENA DICHA, que yo no conocía porque desde hace tiempo estaba en obras: un sitio singular al que hay que volver.
He leído que durante 2010, con motivo del Centenario del inicio de las obras de la GRAN VÍA, el Ayuntamiento de Madrid piensa organizar una serie de eventos. Voy a ver si selecciónARTE es capaz de sumarse a la celebración, y a lo largo de los próximos meses comento algunos de los edificios emblemáticos de la calle.
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11 comentarios:
Anda! pues no se me había pasado a mí por la cabeza que la gran vía no hubiera sido una antigua calle principal. De todas maneras, yo nunca he estado en Madrid.
Y otra cosa: ¿¿vas al matadero?? espero que no seas muy sensible, pues es lo más parecido a la casa de los horrores mezclado con el laboratorio de frankenstein. Y, si quieres un consejo de futura veterinaria, échate vicks vaporub debajo de la nariz para no marearte con el olor. (funciona unos 15 minutos y luego te tienes que echar más).
ISI, agradezco tu consejo de futura veterinaria para ir al el MATADERO (¡qué merito tenéis!), pero creo que no hará falta el Vicks Vaporub. En realidad es el ANTIGUO MATADERO: como casi todos esos sitios que ya no se usan y el ayuntamiento no sabe qué hacer con ellos, lo convirtieron en un “espacio cultural”. Por las fotografía se puede parecer un poco al laboratorio de Frankenstein, pero eso ya lo contaré cuando vaya. Además, en el último cartel publicitario que he visto suyo –anunciaba una obra de teatro- aparecía el típico dibujo de libro de anatomía con un tío abierto en canal, así que no ibas desencaminada.
Al leer tu entrada he recordado una novela que leí hace quizá un año: el típico best-seller (muy entretenido, esa es la verdad) en el que unos malos malísimos secuestran un autobús escolar y se llevan a todos los rehenes a un matadero. El matadero ya no está en uso, pero sigue con todas sus herramientas, y con sus ganchos, y sus almacenes, sus depósitos, su olor a carne y sangre ... Un escenario que realmente sobrecoge, más o menos como el que tú describes.
xG
De la Gran Vía, mi fase favorita es la 3ª, que llega hasta los años 50 o así. A ver que organizan el año que viene por el centenario.
Respecto al Matadero, lo han cambiado poco... pero no tan poco como comentais. Esperamos la crónica.
.
Bueno, pues si hay obras de teatro, claramente no es lo que yo te estaba comentando. Hijo, espero que hayan hecho una limpieza a fondo, quiero decir, que lo hayan tirado y vuelto a levantar, porque si ves nuestro matadero alucinas. allí aunque esttuvieran un año limpiando, eso sería un asco. POr poner un ejemplo, hay un muro (donde vacuno; está separado ovino-vacuno-porcino) de esos de azulejos blancos pero manchado todo con chorretones de sangre, cual película gore. Y esto te digo que lo tienen a primera hora de la mañana; antes de que llegue ningún animal... ¿¿PERO NO LIMPIAN?? madre mía qué asco.
Y bueno, no nos morimos porque dios no quiere, porque si ves la de parásitos internos que traen los animales, de esos que pueden afectar al hombre... yo no sé quién hace los controles, o si directamente se los saltan a la torera...
Bueno, que me enrollo!
que lo pases muy bien en el matadero-cultural (espero que no haya muro de chorretones)
ALFARAZ, ya ves que la parte de la GRAN VÍA de la que hablas es justo la que no nos dio tiempo a recorrer, y seguramente es la más interesante por más racionalista. Tiempo hay para hacerlo, de todas maneras.
Ya contaré del MATADERO (ISI, menudo panorama nos pintas ...).
xG
Me ha encantado la entrada, porque siempre he querido saber más cosas del Madrid "de toda la vida" (y por desidia lo he ido dejando)
Entiendo que era una visita privada, verdad? Bueno, cuando tenga todas tus reseñas, me daré un paseito con ellas e iré viendo cosas.
Me he acordado la zarzuela "La Gran Vía" que se compuso para celebrar la creación de la calle y tenía, por ejemplo una canción dedicada al "Caballero de Gracia", que naturalmente era un caballero así tal cual :-)
Isi, estoy convencida de que dejaron el nombre en plan "modernez" para causar más impacto que si lo hubieran llamado "Centro de Artes Escénicas Tierno Galván" (por ejemplo)
En realidad, LOQUEMEAHORRO, el promotor era el amigo de un amigo, que es profesor de arte (a pesar de no ser madrileño lo sabe todo sobre Madrid; y cuando digo todo es TODO) y había organizado el recorrido para un público variopinto: otros profesores, amigos, algún alumno... yo acabé allí un poco de rebote. Supongo, de todas maneras, que con la conmemoración del centenario se organizarán recorridos parecidos.
Por cierto, alguien citó la zarzuela que dices, pero como por desgracia el género chico no es mi fuerte, no me quedé con el comentario.
xG
Me ha encantado la explicación de ese paseo tan bonito. Yo visito mucho Madrid pero nunca he hecho un paseo parecido. Te vas enterando poco a poco de cosas, pero tu paseo me ha parecido muy ilustattivo.
En Toledo, el ayuntamiento hace esos paseos por todo el casco viejo, con una iluminación especial y te explican toda la historia. Yo estoy viendo para ir, parece buena idea ¿no?
Un saludo
Teresa
TERESA, hace poco –relativamente poco, la verdad: meses- tuve ocasión de visitar Toledo con un guía experto, y desde luego es una magnífica idea: es una ciudad interesante como pocas.
Gracias por tu comentario,
xG
Dime cómo lo hiciste, por el Ayuntamiento o localizaste tú el guía.?
Me interesa mucho pues queremos ir a Toledo.
Un saludo
Teresa
TERESA, en aquella ocasión el guía era un amigo, doctor en Historia del Arte. Le pedimos una visita guiada a cambio de una invitación a comer. Aceptó, y claramente salimos nosotros ganado: la vista fue sensacional y todos comimos estupendamente. Pero claro, eso no es fácil que se vuelva a repetir ...
xG
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